domingo, 19 de julio de 2009

In memoriam.


18 de julio de 1969. Viernes. Barcelona està medio vacia. Es festivo y mucha gente se ha acogido al puente. El tiempo es espléndido, cielo despejado, sin nubes, con viento flojo del SE, calor: 27,4ºC a la s 10 h, humedad del 41%. El Apolo 11 viaja hacia la Luna. Y aquí, de pronto, siempre es de pronto, D. Francisco Moreno Lopez concluye su aliento, abandona el dolor y la penosa agonia, tambien el sueño y la esperanza, y se transforma en memoria, en recuerdo, para mí regresa ahora en una sonrisa que preside una fotografia en blanco y negro. Y Olimpia lo abanica amorosamente por ultima vez y se le quiebra el alma si hubiera alma o si pudiera quebrarse y llora y Gemma se sobresalta en su vientre, tal vez ya quiera nacer, muerte y vida, y la pena, siempre como una sombra, para siempre. Vendran otros llantos y otras alegrias y el tiempo harà de arado en su piel. Armstrong dejará en dos dias sus huellas en el polvo inmóvil de la Luna, inmutables. La huella del adiós de D. Francisco tambien quedarà intacta en la pena sobrecogida de Olimpia, aun niña, esa niña que ya no puede acogerse al abrazo fuerte y protector de su padre, hasta que ella tambien se transforme en polvo de estrellas. (Yo, ajeno a ello, siempre en mi mundo paralelo, jugaba a astronautas y a piratas en Salou, creyendo aún que todo era eterno).

Esquela aparecida en La Vanguardia, Edición del sábado, 19 julio 1969, página 31

Se nos viene la Navidad encima

Shopping Night Barcelona (03/12/2015, foto del autor)      Nos acercamos de nuevo, irremisiblemente,  al centro de este tornado anual q...